jueves, agosto 26, 2010

las diez mejores canciones de The Beatles según revista Rolling Stone


NUEVA YORK.- La revista Rolling Stone elaboró por primera vez una lista con las 100 mejores canciones de The Beatles y el tema de 1967 "A Day in the Life", escrito por John Lennon, encabezó la lista publicada el miércoles.

En segundo lugar quedó el exitoso sencillo de 1963 "I Want to Hold Your Hand", seguido por "Strawberry Fields Forever", que recordaba la nostalgia de Lennon por su infancia en el puerto británico de Liverpool.

La lista fue publicada como parte de una edición especial para coleccionistas titulada "The Beatles: 100 Greatest Songs" que coincidirá con el aniversario de los 40 años de la salida del duodécimo y último disco de estudio de los "Fab Four", "Let It Be".

"Lennon, McCartney y Harrison tenían estándares increíblemente altos como compositores", señaló el músico Elvis Costello en la introducción a la lista de Rolling Stone.

"Entonces ellos comenzaron a crecer de verdad: de simples melodías de amor a historias de adultos (...) y a ideas más grandes que las que uno esperaría encontrar en pegajosos versos de música pop", agregó.

"Yesterday", el tema que McCartney realizó en 1965 y que durante su composición recibió el título de "Scrambled Eggs", quedó cuarto, en tanto, "In My Life", que está incluida en el álbum "Rubber Soul", quedó quinta.

"A Day in the Life": los relatos en el diario

Cierra la extraordinaria serie del disco Sargeant Pepper's lonely hearts club band, donde Lennon inicia su relato a partir del accidente fatal que sufrió el joven aristócrata y alocado personaje del Swingin' London Tara Browne: "Leí las noticias hoy (...) Se voló los sesos en un automóvil / no se dio cuenta que el semáforo había cambiado". La canción de basa en éste y otros artículos periodísticos y combina como nunca antes, la banda de rock británica y con los crescendos orquestales y las voces de Lennon y McCartney alternando las secciones vocales.

"I Want to Hold Your Hand": amor adolescente

Fue el cuarto single en los inicios de la Beatlemanía y con éste el grupo alcanzó similar éxito en Inglaterra y en Estados Unidos, en 1963. Es una canción poderosa en cuanto a ritmo y armonías vocales, interpretada en unísonos por Lennon y McCartney. Habitualmente se utiliza para diferenciar las posiciones entre unos correctos Beatles, que cantaban "quiero tomar tu mano" y unos desafiantes Rolling Stones, que ese mismo año decían "quiero hacerte el amor".

"Strawberry Fields Forever": nada es real

Otra vez la mano de John Lennon se impone, por poesía críptica y por el regreso a las raíces de Liverpool, como todo ese mismo álbum Sargeant Pepper... de 1967. Fue un single previo al disco, pero marcó la dirección de la nueva música psicodélica de los Beatles de ese año, que además incluyó la imaginería provinciana del norte de Inglaterra. Está inspirada en la casa del Ejército de Salvación en Beaconsfield Road, Woolton, Liverpool, cerca de donde Lennon vivió de niño. Musicalmente resume el espíritu Beatle, con banda de rock, orquesta sinfónica, música de la india y experimentaciones sónicas en el estudio de grabación.

"Yesterday": huevos revueltos

La melancólica balada de 1965 cuenta con dos increíbles características. Una es el récord mundial de versiones distintas que se publicaron (la cifra habla de más de dos mil) y otra es el título que originalmente iba a tener esta pieza: "Huevos revueltos". Menos mal que Paul McCartney, su autor y quien la había escrito en la casa de su novia, la actriz Jane Asher, alteró el título por "Ayer". Tiene a Paul frente a la guitarra acústica acompañado únicamente por un conjunto de cuerdas de cámara con los arreglos del productor George Martin.

"In My Life": amigos y amores

También de 1965 y escrita por John Lennon para el disco Rubber soul, se le considera el primer himno de los Beatles, por su carga emotiva, existencialista y autobiográfica a la vez. Tiene una línea dedicada a su gran amigo, el estudiante de arte de Liverpool y primer bajista de los Beatles, Stuart Sutcliff, quien falleció en Hamburgo en 1962: "Algunos amigos han muerto y otros viven / En mi vida los he amado a todos".

"Something": la rubia debilidad

Frank Sinatra, autoridad en música romántica por cincuenta años, la escogió como la más grande canción de amor de todos los tiempos. Claro que la depositaria de esta pieza de George Harrison, publicada en 1969 en el disco Abbey Road, era la modelo Patti Boyd, novia y luego esposa del Beatle desde 1964, pero que lo abandonó para huir con Eric Clapton: "Algo en su manera de moverse / Me atrae como ninguna otra amante (...) En alguna parte de su sonrisa ella sabe / Que no necesito otra amante".

"Hey Jude": toma una canción triste y mejórala

Corre 1968 y Paul McCartney ha tomado las riendas y la dirección musical de los Beatles, dado que Lennon ya está más interesado en su vida junto a Yoko Ono y se siente cada vez más alejado de la figura del "astro del pop" que ostentaba desde 1962. McCartney escribió estas líneas inspirado en el hijo de John, Julian Lennon. De hecho su título evolucionó desde "Hey Jules" a "Hey Jude" y fue escrita para consolar al niño tras la separación de su padre y su madre Cynthia Powell. Es una de las más extensas y su melódica y estupenda coda de cuatro minutos cantada a coro siempre es infalible.

"Let It Be": la madre siempre es sabia

Otra de Paul. Si "In my Life", de John Lennon, fue el primer himno Beatles, entonces "Let it Be" cierra en 1970 la trilogía tras "All you need is love" (1967). Simplemente, "Déjalo ser". Le dio el título al último disco editado por el grupo, Let it Be, que conecta de este modo las carreras solistas de Lennon, Harrison y el propio McCartney. Según cuenta Paul, escribió la canción después de un sueño donde aparecía su madre, Mary, muerta cuando él tenía sólo catorce años: "Cuando me veo en problemas / La Madre María viene hacia mí / Hablándome sabiamente, "déjalo ser".

"Come Together": ahora mismo, ahora ya

El número de apertura del extraordinario disco Abbey Road de 1969, tiene una de las canciones más hippies de los Beatles, con su autor, John Lennon, convertido en un peludo y barbudo músico y poeta, enamorado salvajemente de Yoko Ono y siempre dispuesto a probar nuevas sustancias. "Come together" fue inicialmente un encargo para la campaña gubernamental del extravagante académico universitario Timothy Leary en California en contra de Ronald Reagan, pero no se pudo utilizar dado que el candidato terminó en prisión por posesión de marihuana.

"While My Guitar Gently Weeps": Clapton es dios

Cuando Eric Clapton ejecuta el solo, uno puede advertir cómo es el llanto de una guitarra. El músico, por entonces el mejor amigo de George Harrison, fue invitado al estudio para colaborar en esta dramática pieza perteneciente al guitarrista lead de los Beatles. La traducción es literal: "Mientras mi guitarra llora suavemente". Apareció en el único disco de doble extensión de los Beatles, títulado The Beatles (1968), pero conocido como The White Album, por su portada en blanco perfecto. Igual que la canción.